Un político homófobo es sorprendido en una orgía gay y se convierte en un icono irónico

El político homófobo húngaro József Szájer ha renacido como icono gay de cuero en las calles de Roma. El artista callejero italiano Laika ha exhibido con orgullo su visión de un Szájer sin camisa y vestido con arnés, con varios hombres desnudos en el fondo, con un pequeño recuadro que declara que Szájer es el “nuevo icono gay húngaro”. El artista, mostró su visión del homófobo húngaro en Instagram.

Diciendo que el “gobierno de Orban declaró literalmente la guerra a la comunidad LGBT +”, Laika denunció la hipocresía del gobierno al tiempo que pidió una Hungría más inclusiva y tolerante “donde incluso Szájer puede ser libre de vivir su sexualidad de la manera que cree, sin esconderse de su propio partido.”

El año pasado, la policía belga tuvo que acudir a una aparente orgía gay después de que los vecinos se preocuparan de que la fiesta violara los protocolos de cuarentena. Al parecer, Szájer fue detenido intentando escapar bajando por una tubería de desagüe. Posteriormente anunció su dimisión como diputado al Parlamento Europeo a finales de año como consecuencia de ello. La policía practicó 20 detenciones en la orgía, en la que la mayoría de los invitados se desnudaron al llegar. Algunos de los asistentes a la fiesta pensaron que los policías disfrazados formaban parte del espectáculo e intentaron desabrochar los pantalones de los desprevenidos agentes.

“No nos sentamos a beber té”, dijo entonces el organizador de la fiesta, David Manzheley. “La gente está aquí para tener sexo”.
La participación de Szájer en el evento generó un escándalo en Hungría, donde es más conocido como cofundador del partido derechista Fidesz y es un aliado clave del primer ministro húngaro Viktor Orban. Ambos crearon el Fidesz en 1988 para protestar contra la ocupación de su país por la antigua Unión Soviética. Posteriormente, el partido cambió a una plataforma socialmente más conservadora tras el colapso de la superpotencia comunista. Szájer está casado con Tünde Hando, juez del Tribunal Constitucional de Hungría. Juntos tienen una hija. Szájer, de 59 años, fue duramente criticado por Orban, y se disculpó por su implicación en el asunto. Finalmente, no fue acusado por sus acciones, ya que goza de inmunidad diplomática.

Aunque no se sabe si Laika, que toma su nombre del perro ruso que fue el primer ser vivo lanzado al espacio, piensa llevar su obra a Hungría, agradeció a Szájer “por asestar un duro golpe a la intolerancia”.

“Desde hoy eres el nuevo icono gay húngaro”, declaró Laika.