Después de seis semanas de mucho esfuerzo y trabajo los mini chefs lucharon por el trofeo de Masterchef Junior 8 resultando victoriosa Aurora, quien se convirtió en la ganadora con menos edad (9 años) en hacerse con los 12 mil euros en metálico y un curso de formación en la Facultad de Ciencias Gastronómicas Basque Culinary Center.
Con un menú compuesto por un Tartar de gamba blanca, aire de remolacha y jengibre, mini rabanitos y toques cítricos, Lubina a baja temperatura, jugo de gamba roja, multiesférico de aceituna y setas en textura y de postre Espuma de yogurt, helado de mango, gelatina de fruta de la pasión y almendra caramelizada, enhorabuena, Aurora es la rotunda ganadora de la octava edición de Junior MasterChef.
Así estuvo la final
En la primera parte del programa los Cazafantasmas invadieron el plató indicándole el paso a paso a los cuatro finalistas Aurora (9 años), Henar (10 años), Javier y Nicolás (11 años) quienes realizaron una receta del gran chef Jesús Sánchez de 3 estrellas Michelin del restaurante cántabro Cenador de Amós.
Para la última prueba de exteriores, los aspirantes viajaron a tierras gaditanas. En concreto, al Puerto de Santamaría donde se ubica Aponiente, el famoso restaurante dirigido por el cocinero Ángel León. Junto con el conocido como ‘chef del mar’ realizaron un menú para unos comensales muy especiales: 12 de los famosos que participaron en la última edición de MasterChef Celebrity 5 (cuya ganadora fue la actriz y empresaria Raquel Meroño).
Finalmente, los dos aspirantes Aurora y Nicolás, transformaron todo lo aprendido en un menú libre formado por un entrante, un plato principal, y un postre. Para catar y valorar estos menús, los jueces Pepe, Jordi y Samantha estuvieron acompañados por los chefs del prestigioso restaurante ‘Disfrutar’ de Barcelona Oriel Castro y Mateus Castaña.
Así, tras el duelo final, Aurora sucedió en lo alto del pódium de MasterChef Junior a Lu, la ganadora de la anterior edición del programa.
Momentos antes
Previamente a la emisión del programa, a través de un directo de la cuenta Instagram @masterchef_es dirigido por Abel Arana entrevistó a los cuatro mini chefs que esperaban con ansias la transmisión de la gran final.
La ganadora, Aurora, durante toda la competencia fue considerada como ordenada, trabajadora y respetuosa de los demás, explicó que lo que más le gusta de la cocina, es compartir una buena comida con sus amigas. Sus platos favoritos son el puchero y la tortilla de patatas de su abuela. Estar en MasterChef Junior fue una experiencia única que aunque estaba muy nerviosa por la final fue una ilusión y un sueño cumplido.
Cuando la catalogaron como un icono feminista indicó “Yo no cambio porque a le gente no le guste, yo soy así”. Tras su paso por el programa lo más fácil que se le hizo es la cocina de vanguardia y lo que más se le resiste es a lo clásico: guisos, lentejas. Su juez favorito es Pepe.
Agradeció a sus fans por el apoyo desde el primer programa. Participó en el casting de Sevilla. Va a seguir cocinando. Llegó al programa sin saber freír una patata y se apuntó porque la abuela convenció a la mamá quien se resistió en un principio.
Invitó a que se apuntaran a la próxima edición.
“Aurora y yo somos una pareja ideal en la cocina”
Nicolás, se presentó al casting de Sevilla. Convenció a su mamá para apuntarse. Asistió con todas las medidas de bioseguridad, aunque no se podían probar los platos se esforzó en hacer una presentación extraordinaria. Se emocionó al ser el primer finalista y reconoció que hace una pareja ideal de cocina con Aurora. Recomendó a todos los interesados que se apunten al próximo Junior Master Chef porque es una experiencia inolvidable.
“Siempre Diva, nunca Indiva”
Henar, con una familia dedicada tradicionalmente a la hostelería y regentan un bar propio, así que, está más que acostumbrada a que la cocina sea parte de su día a día. La comida preferida de esta madrileña son los macarrones.
Desde el principio no tuvo reparo en confesar su amor por el chef Jordi Cruz, tanto que incluso le daba vergüenza estar en el plató con él.
Indicó que Junior MasterChef es una experiencia única, es una cosa que está guay y le ha molado la vida. Le sale solo ser su personalidad. La pasó genial la cuidaron como si fueran sus padres. Lo más duro fue haber estado alejada de su familia por tantos días. Decidió presentarse al casting desde la temporada anterior pero no se sentía preparada. Su hermana le informó de la apertura del concurso y se apuntó para realizar el casting.
Está súper contenta porque no se imaginó llegar a la final y no se cree el cariño que le han demostrado durante todo el programa. Después de MC lo mejor es cocinar las verduras que son fáciles de cortar, lo que más le cuesta son las masas porque en los tutoriales no puede apreciar la textura. Si no es chef quisiera ser cirujana. Se despidió con su “Siempre Diva, nunca Indiva. Todos somos bellos y lo sabemos”.
Ángel por dentro Demonio por fuera
Javier dijo estar nervioso. Reconoció que es muy cariñoso y que su comportamiento durante el programa se debió a que considera que por dentro es como un ángel y por fuera es un demonio travieso. Aunque al principiro tuvo problemas con Antony ahora comparte una amistad temporal. MasteChef para el le generó mucha ilusión por aprender todo en la cocina.
Reconoció que se parece al chef Jordi Cruz que hasta tienen el cabello del mismo largo, solo que él lo tiene más rizado. Cocina recetas de la Thermomix pero las realiza él mismo, como por ejemplo la tarta de queso. Agradeció todo el apoyo a sus seguidores desde que comenzó en el programa.
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