El Fetiche del Oso Maduro de Fassbinder visto por François Ozon

François Ozon retoma a Fassbinder con “Las amargas lágrimas de Petra Von Kant” que han sido reimaginadas con un giro radical de género en la última película del autor francés. Peter Von Kant, incluye intimidad poco reconocible del director alemán: El Fetiche del Oso Maduro en Cuero.

El Fetiche del Oso Maduro con ropa de cuero incluida

Peter Von Kant es la reimaginación con un giro de género del clásico de Rainer Werner Fassbinder de 1972, Las amargas lágrimas de Petra Von Kant, del guionista y director François Ozon. El estreno de la película coincide con la celebración del 50º aniversario de la querida película alemana.

La película original contaba con un reparto íntegramente femenino y narraba la historia de Petra, una destacada diseñadora de moda lesbiana que mantiene una relación sadomasoquista con su ayudante, y que se enamora de una joven distante y hermosa.

Los giros de François Ozon 

El aclamado guionista y director Ozon (Swimming Pool, 8 Women) invierte los géneros de los personajes principales de la audaz película del guionista y director alemán Fassbinder, y Petra pasa a ser Peter (Denis Menochet) como Peter Von Kant, evocando el personaje del propio Fassbinder. 

En un homenaje al difunto, brillante, pero problemático director underground alemán, donde la sofisticada y aguerrida Petra es ahora es un Oso Maduro vestido de cuero, Peter.

• Isabelle Adjani interpreta a Sidonie, la glamurosa actriz musa de Peter, que le presenta a Amir (Khalil Gharbia), un sexy joven de 23 años. Amir hechiza al instante a Peter, que le invita a volver la noche siguiente para hablar de su carrera como actor y de un posible papel en su próxima producción. 

• Stéfan Crépon interpreta a Karl, el silencioso asistente al que Peter disfruta atormentando.

• Como otro elemento del homenaje de Ozon a Fassbinder, Hanna Schygulla, el objeto original del deseo de Petra, interpreta ahora a la madre de Peter.

Al igual que en el original, basado en la obra de teatro de Fassbinder, Ozon confina la mayor parte de la película al extravagante apartamento de Peter en los años 70, con el apoyo de la expresiva escenografía de Katia Wyszkopf, que a su vez se hace eco de la escenografía teatral de Las amargas lágrimas de Petra Von Kant.